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jueves, 6 de noviembre de 2008

boeing new realaise

Los Taviani abordan el genocidio armenio con Paz Vega al frente
• La actriz interpreta a una víctima de la matanza en 'El destino de Nunik'

• "Es una obligación histórica hacer una película así", asegura Ángela Molina


OLGA PEREDA
MADRID
En estos tiempos de memoria histórica, llega a las pantallas españolas una película que recrea uno de los capítulos más oscuros del siglo XX: el genocidio armenio, una auténtica masacre que Turquía no reconoce oficialmente. El destino de Nunik, que se estrena mañana, cuenta cómo los turcos quisieron borrar del mapa a los armenios, con los que habían convivido durante años sin problemas hasta que el racismo hizo acto de presencia. "Es un genocidio que nunca se estudia en los libros de Historia, así que la película será un granito de arena para que la gente sepa lo que pasó", aseguró ayer Paz Vega, que interpreta a la protagonista, una joven que está a punto de saborear lo bueno de la vida cuando la guerra la convierte en una desgraciada sin futuro.
El destino de Nunik supone el regreso al cine de los hermanos italianos Paolo y Vittorio Taviani, que han escrito el guión basándose en el sobrecogedor libro La casa de las alondras (editada por Lumen), de la italiana Antonia Arslan. La novela, una historia de ficción basada en hechos reales, fue galardonada con el Premio Pen Club al mejor libro en Italia y ha recibido mil elogios de los armenios.
Durante su comparecencia ante la prensa, Vega no tuvo reparos en reconocer que antes de leer el guión no sabía absolutamente nada del exterminio del pueblo armenio. "Leí el guión y me enamoré de la historia", afirmó. Para ella, realizar la película ha sido "todo un descubrimiento". Su compañera de reparto, Ángela Molina, fue más allá y aseguró que la cinta es "una obra de arte" de los hermanos Taviani. "Es una obligación histórica hacer una película así", aseguró.

PRECEDENTE
No es la primera vez, sin embargo, que el cine aborda el genocidio armenio. En el 2002, el director egipcio Atom Egoyan realizó la bellísima y durísima Ararat. "Cuantas más películas se hagan de este tema, mejor", concluyó Molina, que interpreta en El destino de Nunik a una criada griega, amiga de la familia masacrada. "No sé qué mueve a los directores a hacer este tipo de cintas. Supongo que su propia conciencia", dijo.
La veterana actriz aseguró que desconocía si la cinta de los hermanos Taviani se estrenará en Turquía. El tema es delicado, añadió, y cualquier "kamikaze" puede reventar un cine a modo de protesta por no estar de acuerdo con el argumento de una película. Sin embargo, a juicio de ambas actrices, El destino de Nunik "no tiene ni vencedores ni vencidos". "Todos los personajes son víctimas de la guerra. Incluido el soldado turco encargado de la expulsión de las mujeres armenias", dijo Vega.
Molina destacó que los hermanos Taviani han sido muy "delicados" a la hora de filmar el horror. A pesar de que algunas escenas son muy duras (incluidas cabezas cortadas y asesinato de niños) la actriz dijo que el "terror no es explícito".
Tras dejar claro que el público que vaya a ver El destino de Nunik "se enterará con conciencia" de los problemas que acarreó el racismo turco, ambas actrices hablaron de sus proyectos. Vega explicó que ha fijado su residencia en EEUU, donde vive con su marido y su hijo y donde no para de salirle trabajo. "En cuatro meses he rodado tres películas", sonrió.

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